El retrato de Dorian Gray de Oscar Wilde
-¿Estás enamorada de él? -preguntó. Ella tardó un tiempo en contestar, pero contempló el paisaje, inmóvil. -Me gustaría saberlo -dijo al fin. Él sacudió la cabeza. -Saberlo sería fatal. La incertidumbre es lo que nos encanta. |