Lena Rose es una chica diferente, lleva ropa extravagante y habla sin parar de cosas que muy pocos entienden. Su vecino Noel es el chico popular y no se junta con raritos y nunca tiene sentimientos por nadie. Pero, cuando se quedan atrapados en un ascensor, empezarán a compartir secretos y su lista de cosas que jamás haría empezará a tambalearse. Y más cuando aparezca Alek, un chico guapo y empollón que amenaza con quitar el liderazgo a Noel pero que también parece encandilado con las extravagancias de su querida vecina, con la que ha pasado de discutir cada día a sentir mariposas que están rompiendo el muro que se ha creado para que nadie vea lo que siente. Este libro me ha gustado mucho. No sólo porque tiene mi cliché favorito, un enemist to lovers en toda regla. Sino porque tenemos a una chica muy diferente que es como quiere ser y no cambia por nadie y ser especial, es lo que hace que se enamoren de ella. Además, tiene temas en los que se profundiza importantes, que viven muchos jóvenes y demuestra como el apoyo de alguien es vital. Creo que trata esos temas con mucho respeto y el personaje de Noel, tan atormentado, nos hace ver como alguien que finge ser perfecto puede tener un mundo interior destruido, no hay fiarse de las apariencias. Tiene una historia de amor bonita, los personajes secundarios son geniales, todos, desde las familias, los amigos... y es un romance que le ha encantado, creo que ese final es el mejor que podía haberle dado. Y las frases, todas las que tiene, tan bonitas y reflexivas, sólo puedo decir que espero muchos más libros de la autora. + Leer más |