La letra escarlata de Nathaniel Hawthorne
Todo el mundo la había mirado severamente: durante siete largos años, está pobre mujer solitaria había sido objeto de las miradas duras y severas de sus semejantes, y siempre soportó todo sin bajar su rostro, firme y triste ... Pero la severidad de este pobre hombre pálido, débil, pecador y agobiado por las penas era lo que Hester no podía soportar sin dejar de vivir
|