Segunda parte de la serie Valientes. Hugo es un chico que trabaja en una tienda de ropa, pero su sueño es trabajar con su padre. Es un chico risueño, un amigo leal y está enamorado de ella desde hace mucho. Sara la crio y la sacó adelante su madre, por eso la adora, por el esfuerzo que hizo, eso la ha convertido en una persona que no se rinde fácilmente y es perseverante. Siempre piensa mucho en las cosas que hace, su mayor pasión es el mundo del arte, donde nunca toma buenas decisiones es en la parte romántica. Ellos son amigos desde hace años, trabajan en el mismo sitio, tienen una buena amistad y ahora van a ser vecinos. El ser vecinos va hacer que Hugo esté más nervioso, pero a la vez van a pasar mucho tiempo juntos. Dos corazones buenos, dulces y sensibles. Dos personas amables, comprensivas y empáticas. El romance se desata después de una noche loca, una que ambos han disfrutado, pero uno de ellos ve que puede perderlo todo por un polvo. Eso hará que se planteen muchas cosas, sus sentimientos sufren unas olas de perspectivas y tendrán que tomar la decisión que les dará todo o que pierdan a la persona que más les importa. Vamos a ver a los amigos que ya vimos en el libro anterior, porque para ellos la amistad y la familia es importante. El pasado de uno de ellos va aparecer para desencadenar muchas preguntas e inseguridades. Un romance de esos que siempre han estado ahí, del que todo el mundo lo ve menos los implicados. Dos personas que encajan a la perfección y se entienden con solo mirarse. Él siempre ha estado enamorado de ella, ella siempre lo ha disfrazado de amistad. La autora nos deja ver quién será la siguiente pareja y tengo que decir que esa historia nos puede hacer sufrir un poco a la vez que enamorarnos. Porque hay amistades que siempre fueron mucho más y amores que siempre serán mucho más. + Leer más |