Todos los días son buenos de Masakazu Hara
Cuando se despertó por la mañana, tuvo un mal presentimiento al ver que dos de sus púas caídas formaban una X en el suelo. Su corazonada era correcta. A lo largo del día: se cayó, le picó un insecto y encima perdió una pluma de pájaro que guardaba con mucho cariño. Por eso, Erizo está irritado |