Dos soledades: Un diálogo sobre la novela en América Latina de Mario Vargas Llosa
(...) El escritor es el eterno disconforme, esté donde esté. Su obra nace del descontento. (...) Cuando el orden perfecto llegue, el escritor seguirá inconforme: lo humano es infinitamente perfectible, y siempre habrá razones para la obra de un escritor. Gabriel García Márquez |