Los encuentros de Cristina de Lighling Tucker
—¿Te has pensado mejor lo de pasar una noche agradable? —preguntó sonriendo. Era un camorrista. No solo por sus pintas demasiado provocativas, como el malote de clase, sino por esa sonrisa que parecía ser capaz de embaucar a cualquiera. Él apenas se parecía a Justin salvo por la forma de sus labios. Estaba convencida de que los hermanos sabían besar muy bien. —¿Y si lo hubiera hecho? —tanteó. Él hizo una mueca con los labios. —No mientras Maddox sea importante para ti. |