Defy de L. J. Shen
Jaime lo tenía todo, y yo no tenía nada. Tenía un pasado dorado, un presente fácil y un futuro prometedor. En cambio, mi carrera se había ido al garete y me iba a costar Dios y ayuda conservar un empleo y no endeudarme. No pegábamos. Ni siquiera para tener un rollo pasajero. Pero era demasiado egoísta y vulnerable como para negarme. Además, acostarme con él sería como devolvérsela a su madre sin que ella se enterara. Todos contentos, ¿no? |