El perro es ahora el señor de la casa. de Juan Pablo Rochín Sánchez
Un rasgo tuyo me cercena deja quieto los zapatos detrás de la puerta, será que la camisa contrahecha y el pantalón del mismo corte desandan igual que los cangrejos que no vuelven nunca a casa ni a desarmar la nave del insomnio con su andanza carilarga, será que tus gemidos me estremecen como un tañer agudo de campanas. |