El sueño de África de Javier Reverte
Entendía la vocación colosal de África, el anhelo de un continente por sobreponerse a lo efímero, ese inaprensible y grandioso vigor que emana de las planicies y del cielo, la fragilidad de su grandeza, la brisa dulzona y húmeda que entra en tu sangre y te inyecta la droga que más puede amar un hombre: el deseo de vivir, el espejismo animal de eternidad.
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