Daisy Miller / Otra vuelta de tuerca de Henry James
La atracción de mis pequeñas cargas era una satisfacción cosntante que me llevaba a maravillarme de lo infundado de mis miedos iniciales, el disgusto que había comenzado a entretener por lo prosaico de mi trabajo. Tal prosaísmo había desaparecido, parecía, junto con el trabajo pesado.
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