La niña del andén de Gill Thompson
Le encantaba tocar; la música era una forma de canalizar sus emociones, un medio para expresarse. La llevaba en el alma. La recompensa que obtenía era inenarrable.
|
La niña del andén de Gill Thompson
Le encantaba tocar; la música era una forma de canalizar sus emociones, un medio para expresarse. La llevaba en el alma. La recompensa que obtenía era inenarrable.
|