El circo de los prodigios de Elizabeth Macneal
Un lobo no puede dejar de ser un lobo. El instinto no puede reprimirse.
|
El circo de los prodigios de Elizabeth Macneal
Un lobo no puede dejar de ser un lobo. El instinto no puede reprimirse.
|
El taller de muñecas de Elizabeth Macneal
No soy ningún idiota, señor. No. Si no me paga una buena pieza de plata, no va a catar mi conejito.
|
¿Qué objetousaron como traslador en el Mundial de Quidditch?