Las deudas del cuerpo de Elena Ferrante
El sol del precioso día invernal daba a las cosas un aspecto sereno. El barrio viejo, a diferencia de nosotras, seguía idéntico.
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Las deudas del cuerpo de Elena Ferrante
El sol del precioso día invernal daba a las cosas un aspecto sereno. El barrio viejo, a diferencia de nosotras, seguía idéntico.
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