![]() |
El amor molesto de Elena Ferrante
En el rostro de los viejos es difícil descubrir las facciones que tuvieron de jóvenes. A veces ni logramos pensar que tuvieron una juventud.
|
Calificación promedio: 5 (sobre 343 calificaciones)
/Encuentra este y otros artículos en http://revistalengua.com Tiene sentido no saber quién se esconde detrás del seudónimo Elena Ferrante. En realidad, no hay motivo alguno para querer saberlo más allá del mero chisme. Elena Ferrante, el símbolo, el enigma que va más allá de un nombre propio, no es solo una, sino muchas: Elena Ferrante son las mujeres que habitan en sus novelas, personajes redondos, con el espesor y la sensibilidad, el brillo y la oscuridad de varias de las más grandes figuras de ficción de nuestro tiempo. Por eso, Elena Ferrante no es solo una, sino la suma de todas ellas. de hecho, uno de los ejercicios más difíciles a los que Ferrante se (y nos) somete como narradora y de los que sale victoriosa es el de enfrentarnos a protagonistas que no son de una pieza, que no se conocen del todo a sí mismas, que no están hechas y cerradas para siempre. En el siguiente texto, prólogo impecable de «Crónicas del desamor» (Lumen, 2015), un volumen que incluye las novelas «El amor molesto», «Los días del abandono» y «La hija oscura», el poeta argentino Edgardo Dobry recorre todos estos modelos de representación de la figura femenina en la obra de la intangible Ferrante. Narrado por Antonio Martínez Asensio.Imagen ilustrativa: Getty Images.
![]() |
El amor molesto de Elena Ferrante
En el rostro de los viejos es difícil descubrir las facciones que tuvieron de jóvenes. A veces ni logramos pensar que tuvieron una juventud.
|
![]() |
|
![]() |
La hija oscura de Elena Ferrante
Pensé en como un acto opaco genera otros de una opacidad cada vez mayor, y entonces el problema reside en romper la cadena.
|
![]() |
La niña perdida de Elena Ferrante
Yo soy un garabato tras otro, del todo inapropiado para uno de tus libros. Déjame estar, Lenù, no se habla de una tachadura.
|
![]() |
La niña perdida de Elena Ferrante
Hicimos un largo viaje, soplaba un viento fuerte, llovía a ratos. El paisaje era de una palidez incrustada de herrumbre, pero el cielo se abría a tramos y todo se volvía brillante, empezando por la lluvia.
|
![]() |
Las deudas del cuerpo de Elena Ferrante
Cada elección tiene su historia, muchos momentos de nuestra existencia permanecen comprimidos en un rincón a la espera de una salida, y al final esa salida llega.
|
![]() |
Los días del abandono de Elena Ferrante
Qué complicada y espumosa mezcla es una pareja. Aunque la relación se deshaga hasta desaparecer, continúa actuando por vías secretas, no muere, se niega a morir.
|
![]() |
La amiga estupenda de Elena Ferrante
Cuando pisé otra vez la calle y volví a ir a la escuela, sentí que el espacio también había cambiado. Parecía encadenado entre dos polos oscuros, por un extremo estaba la burbuja de aire subterráneo que presionaba desde las raíces de las casas, la siniestra caverna en la que había caído las muñecas; por el otro estaba el globo allá en lo alto, en el cuarto piso del edificio donde vivía don Achille, que nos las había robado.
|
![]() |
La amiga estupenda de Elena Ferrante
Ella consideraba que hacía lo correcto y necesario, a mí se me habían olvidado todos los buenos motivos y con toda seguridad estaba allí únicamente porque estaba ella. Subíamos despacio hacia el mayor de nuestros errores de entonces, íbamos a exponernos al miedo y a interrogarlo.
|
![]() |
Las deudas del cuerpo de Elena Ferrante
Sin estas manos ásperas, proclamó, no existiría ni una silla, ni un edificio, ni un coche, nada, ni siquiera tú; si nosotros, los trabajadores, dejamos de deslomarnos, se pararía todo, el cielo caería sobre la tierra y la tierra aplastaría el cielo, las plantas volverían a adueñarse de la ciudad, el Arno inundaría vuestras bonitas casas, y solo quienes llevan deslomándose desde siempre sabrían como sobrevivir...
|
¿En quién se inspiró Bram Stoker para crear su personaje?