La ciudad de los prodigios de Eduardo Mendoza
He aprendido a esperar, pensó, ya sólo encuentro sentido a la espera. Y sin embargo es ahora cuando todo se precipita.
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La ciudad de los prodigios de Eduardo Mendoza
He aprendido a esperar, pensó, ya sólo encuentro sentido a la espera. Y sin embargo es ahora cuando todo se precipita.
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