Nada se opone a la noche de Delphine De Vigan
Lloraba en silencio. Lágrimas con sabor a infancia, lágrimas privadas de adiós, daba vueltas y vueltas en la cama, incapaz de conciliar el sueño.
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Nada se opone a la noche de Delphine De Vigan
Lloraba en silencio. Lágrimas con sabor a infancia, lágrimas privadas de adiós, daba vueltas y vueltas en la cama, incapaz de conciliar el sueño.
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