El amante de lady Chatterley de D. H. Lawrence
Connie no llegó nunca a comprenderle realmente; pero, a su manera, le amaba. Y sentía siempre el reflejo de su desesperanza en ella misma. No podía amarle completamente, lo que se dice completamente, en esta desesperanza. Y él, sin esperanza alguna, no era capaz de amar.
|