Las flores del mal de Charles Baudelaire
"[...] ¡Maldito sea por siempre el soñador inútil, que por primera vez, en su imbecilidad, abordando un problema insoluble y estéril mezcló con el amor la fría honestidad! El que quiera juntar en un místico acorde la sombra con la luz, la noche con el día, jamás calentará su cuerpo entumecido con ese sol bermejo que llamamos amor.[...]" (Baudelaire, 1857). |