El príncipe de la niebla de Carlos Ruiz Zafón
Habrían de pasar muchos años antes de que Max olvidara el verano en que descubrió casi por casualidad, la magia. Corría el año 1943 y los vientos de guerra arrastraban el mundo corriente abajo sin remedio. A mediados de junio, el día que Max cumplió los trece años, su padre, relojero e inventor a ratos perdidos, reunió a la familia en el salón y les anunció que aquel era el último día que pasarían en la que había sido su casa los últimos diez años.⠀
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