Leyendo el título del libro crees que más o menos sabes lo que te vas a encontrar, pero que vaaa... las historias son brutales, lo bueno es que al final casi todas acaban de forma positiva. Bruce Perry cuenta su experiencia desde que empezó a ser psiquiatra infantil: su forma de trabajar, su razonamiento en cada caso, sus conclusiones, sus meteduras de pata... y aunque en algunos casos creo que aburre un poco dando demasiadas explicaciones, lo hace de manera bastante amena. Y como no, también habla del cerebro, es impresionante lo que hace este órgano para protegerse, sobre todo en los primeros años vida. "El impacto de las experiencias tempranas será necesariamente superior al de otras más tardías. El cerebro trata de dar sentido al mundo buscando patrones. Cuando enlaza patrones consistentes y coherentes, los etiqueta como normales o previsibles y deja de prestar atención consciente." |