La voz del violín de Andrea Camilleri
Si, por casualidad, el jefe de la móvil consiguiera poner de su parte al jefe superior y éste, a su vez, hiciera lo propio con el juez Tommaseo, él estaría jodido. Pero ¿cabía pensar que en Montelusa todos se hubieran vuelto deshonestos de golpe? Una cosa es la antipatía que pueda suscitar una persona y otra muy distinta su carácter y su integridad.
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