MUERTE EN LA VICARIA. Selecciones de Biblioteca Oro nº 158 de Agatha Christie
- ¡Cómo! ¿Se le ocurre a usted alguien más? - ¡Oh sí, por supuesto! - Empezó a contar con los dedos - Uno, dos, tres, cuatro, cinco, seis..., sí y posiblemente una séptima. Puedo pensar por lo menos en siete personas que hubieran visto con satisfacción la muerte del coronel Protheroe. Melchett la miró asombrado. -¿Siete personas? ¿En St Mary Mead? Miss Marple asintió vivamente. -Me perdonará usted si no le doy ningún nombre - señaló -. No estaría bien. Pero hay mucha maldad en el mundo. Un soldado digno y honorable como usted no entiende de esas cosas, coronel Melchett. Creí que al jefe de policía le iba a dar una apoplejía. |