Un mundo helado de Naomi Novik
¿Acaso hay algo que no te haya entregado aún? Mi mano, mi corona y la dignidad de mi rango, ¿y me pides que te otorgue un precio todavía más elevado? No. Te contentarás con lo que ya has obtenido de mí a cambio de tu don, y date por advertida, joven mortal, que ese don es lo único que te mantiene en tu lugar. Recuérdalo.
|