Alas de cristal de Carol S. Brown
Simon se separó un poco de ella; tenía la mandíbula en tensión. No obstante, le lanzó una cálida mirada que derritió sus huesos e impulsó el latido de su corazón. Si aquella mirada fuese música, sería la más bella de las composiciones. Y ella quería tocarla hasta que su violín se desgastase.
|