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Este libro ha sido una lectura muy agradable y llena de emociones. La sinopsis me pareció muy intrigante porque me encanta la temática de protagonistas que pierden la memoria y en esta historia conoceremos a Elizabeth, una mujer que vive envuelta en un bruma porque un accidente provocó que perdiera la memoria y se encuentra constantemente especulando lo que pudo haber sucedido esos años atrás y el motivo por el cual su familia la haya exiliado a vivir alejada de Londres cuidando a sus tías, sin embargo, por un juego del destino se encuentra con Albert Clawson, un conde que la intriga y despierta sentimientos intensos en ella, pero lo que ella no recuerda es que ese hombre fue su esposo, quien la ama profundamente y esconde un gran secreto y debido a una enfermedad de la que tiene que recuperarse en casa de él, ella empezará a tener sueños que la harán cuestionarse qué es real y qué son sólo sueños. El libro me cautivó, es de una lectura muy ágil y ligera, con su toque de intriga, un romance apasionante y hermoso que me pareció tan sincero e intenso, me encantaba que Albert amara de una manera tan intensa a Elizabeth y que quisiera protegerla aunque él se sacrificara. Y los giros finales no me los esperaba, yo tenía unas hipótesis y ver el rumbo que tomó la historia me pareció impactante. Lo recomiendo ampliamente para las amantes del romance histórico, nos regala una historia bella e intensa. |
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