Cuando giran los muertos

Novela que navega entre la historia y el thriller, con tremendas gotas de humor negro, suspense y sarcasmo.
Forma parte de una serie de suspense histórico (es la séptima) protagonizada por el capitán Andrade, pero que se puede leer de forma independiente.
Este personaje, que es el epicentro de este terremoto novelístico, está muy bien construido: oscuro, ácido, con un sentido de la justicia muy peculiar, nos regala unos diálogos con los demás personajes que transitan por la obra, que nos invitan a reflexionar.
El autor introduce una gran amalgama de personajes variopintos y hechos alucinantes, que dan riqueza a la trama de la novela, y su prosa nos refleja la riqueza lingüística del español, no sólo por el lenguaje amplio y variado que utiliza, si no también por sus expresiones tomadas del mexicano más profundo y cerrado.
Nos encontraremos con numerosos guiños a grandes como Lorca, Octavio Paz, Remedios Varo (amo a esta pintora), menciones de personajes y referencias históricas casi caídas en el olvido. Yo he aprendido un montón de una época silenciada por la historia que nos enseñan... exiliados republicanos en México, espías rusos, ..por qué como dice el autor en boca de un personaje: " México no era un pais, sino una forma de locura"
Estoicismo, es una de las palabras que más comparten el prota y su protegido el diplomático y escritor Félix Arcadia, reflejo de un personaje real que se menciona al final del libro, un término que viene ni que pintado para este tandem (en una suerte de versión dura y oscura de el guardaespaldas) que con sus juegos de palabras y diálogos hará que paséis muy buenos ratos.
Los personajes se mueven en terrenos pantanosos de la diplomacia y politíca mundial de la época, (años 50 0 60) en un México casi fantasmal y etéreo, lleno de tradiciones y misterios ancestrales, con unas descripciones de los paisajes urbanos y rurales que quitan el hipo, y en donde se hacían y deshacían tejemanejes diplomáticos, ya que como se menciona "la política no tenía que ver con la felicidad universal, si no con la gestión de los intereses que se compartían con los enemigos".
El final te deja alucinada haciendo cierto el dicho de no hay nada más democrático que la mala suerte...pues eso, que lo disfrutéis que merece la pena mucho.