Ecos de los mitos olvidados

—Es cierto –afirmó Maddi—. Somos egoístas e irresponsables, pero también somos solidarios y compasivos cuando es necesario. En ocasiones nos cuesta entenderlo y, la mayoría de las veces, tiene que ocurrir un desastre para recordárnoslo; pero ¿sabes qué? Algunos aprendemos de nuestros errores e intentamos mejorar día a día.
—Eso es. Puede que como individuos parezcamos débiles, pero si nos unimos podemos hacer cosas increíbles –intervino Tomah—. Cosas maravillosas. Sólo tenemos que recordar que la Tierra es nuestro hogar y el único que tendremos.

—Este hombre acaba de renunciar a una fortuna estimada en seis mil millones de dólares—le dice Nyx a su hija—. ¿Recuerdas lo que hablamos sobre los héroes? Héctor, Aquiles, Jasón, Perseo... Ninguno lo era. Conquistadores, sí. Asesinos en masa, también; pero no héroes. Ahora, al fin, puedes ver uno. Los que lo son de verdad no portan espadas ni dirigen ejércitos. Los mayores psicópatas han sido bendecidos por la fama y la gloria, pero a este tipo de héroe solo le espera el olvido. La historia es injusta, por eso es una gran mentirosa.