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Hola, espero que estos primeros meses del año se estén portando bien con vosotros/as. Hoy vengo con una reseña de un libro que en parte me ha gustado, pero en parte me ha disgustado, mejor os comento en la reseña, pero bueno esperaba, por reseñas y comentarios que había leído, mucho menos de su lectura, la verdad es que me ha tenido enganchada todo un fin de semana. Estamos ante una historia contemporánea, hay que meterse en la piel de los personajes, sentir sus problemas, así que aviso que son adolescentes en su último año de instituto. Lo mejor es que no son problemas de no tener novia o de sacar los exámenes, aunque sé que muchos de vosotros os sentiríais identificados, pero este libro nos habla del acoso escolar, de denigrar a una persona por ser diferente y de maltrato. Son temas de nuestro día a día, estos personajes se nos presentan al comienzo del libro, en ellos veremos tres personajes muy diferentes entre sí pero los mejores amigos. Además de una narración muy sencilla y cómoda tenemos unos capítulos muy cortos. Todo está contado en primera persona y lo malo es que en algunas ocasiones esta primera persona me ha dificultado la lectura un poco, pero no por la traducción ni su forma de narrar, ha sido porque Lydia tiene una actitud que en ocasiones no me ha gustado, tengo que decir que he sentido más empatía por los otros personajes, ella es la que menos me ha gustado, quizás es que su vida es más perfecta y sin problemas comparada con la de sus amigos. Los personajes desde luego que puedo decir que están bien llevados, sin duda el autor nos sabe dar unos que no son para nada perfectos ni moralistas, en ocasiones incluso pueden resultar egoístas, pero me ha gustado ya que así somos todos, nada de personajes que me hagan dudar de la historia. Lydia es bloguera de moda, tiene cientos de seguidores en sus redes, algo de lo que se siente muy orgullosa, pero no de sus amigos ya que no concuerda con el estilo que ella promueve. Dill es un chico marginado por culpa de su padre, un extremista religioso al que han metido en la cárcel por tener pornografía infantil. Y después tenemos a Travis, un chico que adora por encima de todo los libros de fantasía, le gusta entrar en foros de debate sobre su libro favorito, al que lleva a todos lados, al igual que un palo como su personaje favorito, pero en casa su padre no lo comprende y a la vez es un borracho violento. También como he comentado la trama me ha gustado, pero me ha costado más de 100 páginas meterme de lleno en ella, poder comprender a los personajes y sus vidas, poder engancharme de una manera mejor a una historia que esperaba poco, pero me ha dado lo justo para ser una historia normal y corriente. Lo que pasa es que desde cierta parte no podía parar, creo que me he metido a partir de esas páginas en la novela, y he estado todo el fin de semana dándole vueltas a todo lo que les pasa a los personajes. En cierta parte lo malo es que cuando estoy más metida en la historia pasa algo, un giro inesperado y doloroso, a partir de ese giro me ha empezado a interesar cada vez menos, me daba la sensación que el autor alargaba y alargaba la novela, dando un final que me ha dejado un sabor agridulce y soso a mi parecer. Por mi parte es una montaña rusa, normal al principio, bien entre medias y después de cara al final muy mal, así que tengo muchas sentimientos encontrados con esta novela, yo os la recomiendo si os gusta John Green porque es de su estilo. Enlace: https://rubiesliterarios.blo.. |
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