Segunda parte de la trilogía, que transcurre años después de la caza del topo. Nos encontraremos de nuevo con los protagonistas y conoceremos otros personajes. La situación política ha cambiado y nos hallamos en una Europa a las puertas del Brexit. Al igual que en la primera parte, la credibilidad es el punto fuerte. No sólo en cuanto a los personajes, sino en cuanto al trabajo de espía y a las relaciones internacionales. La habilidad de mezclar ficción con sucesos reales es digna de resaltar y nos hace plantearnos hasta qué punto la ficción es solamente ficción. Los capítulos son cortos y la lectura muy ágil. Es un libro para leer en días o tres sentadas. |