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En 1976 , aparece el cuerpo de una chica muerta y Karin Muller será la encargada del caso y nombrada comandante de la Policía del pueblo. El problema es que la Stasi siempre está encima para limitar sus decisiones y acciones, algo que Muller no está dispuesta a consentir. Pero un día, desaparece también el hijo de uno de su equipo, un adolescente muy cerrado en sí mismo, y parece tener relación con todo el caso que Muller está investigando. Tendrá que enfrentarse a muchos obstáculos si quiere descubrir cuál es la verdad. Es un thriller interesante aunque es lento y yo soy más de thriller que desde el principio me tenga en vilo. Este es lento, poco a poco vas descubriendolo todo pero las últimas 100 páginas si son más rápidas y te enganchan mucho. Otra cosa es que tienes que estar muy pendiente porque salen muchos nombres en alemán que me costaba pillar el hilo, de todos los tipos de puestos en la policía y cosas así. de todas formas es un libro que va más a menos y se va poniendo más interesante según avanza. Si os gusta el thriller lento que va subiendo de intensidad, os gustará. |
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