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A Kaine la vida le ha dado un duro golpe, su marido murió hace poco en un supuesto accidente de tráfico, del que ella está convencida que no fue un simple y desafortunado accidente. Desde entonces se le hace todo muy cuesta arriba. Por eso decide comprar una antigua casa abandonada en Oakwood (Wisconsin), ciudad donde nació su abuelo. Su intención es reformarla y empezar una vida nueva allí, lejos de toda vida anterior y los malos recuerdos. Además, también descubrir un poco sobre sus antepasados, concretamente sobre su abuela Ivy Thorpe. En 1906 Ivy vive con su padre que es el medico y forense. En el pueblo se le conoce como La guardiana de la memoria porque le gusta escribir sobre la gente que ha muerto en el pueblo. Un día descubre a una joven muerta cerca de la casa y decide investigar quien es esa joven y qué le ha ocurrido, tarea que no le va a resultar fácil ni del todo segura. Además tiene que lidiar con el problema de tener que volver a enfrentarse con alguien de su pasado, con quien estuvo muy unida pero que un día sin más sus vidas se separaron, hasta ahora. La mansión de Foster Hill es una casa que construyeron la familia Foster muchísimos años atrás, tras un tiempo estos se fueron del pueblo sin saber nadie porqué y la casa ha estado vacía durante años. Kaine la ha comprado sin conocer nada de ella, tan solo un par de fotos, y una vez allí ve que no es lo que ella esperaba, el estado es más ruinoso del que aparentaba en las fotos. Además se da cuenta que a la gente del pueblo no le gusta hablar de esa casa, pues hay un rumor que dice que está encantada. Con capítulos cortos, ambas tramas se van intercalando en la historia para contarnos todo lo que les ocurre a las dos mujeres, junto a ellas descubriremos los peligrosos secretos que esconde la mansión de Foster Hill. Esto lo convierte en una lectura ágil, y consigue mantener el suspense en todo momento ya que quieres saber que les ocurre a cada una de ellas en todo momento. En mi caso, el misterio que hay con Kaine fue mayor, las cosas que le ocurren me intrigaron más en comparación con Ivy, pero justo al pasar la mitad del libro esta parte de la trama va en auge hasta llegar al mismo nivel. Me ha encantado la forma en que la autora a conseguido mezclar ambas tramas, relacionadas en una misma casa y hacernos ver poco a poco qué relación había entre ambas a pesar de los años que hay entre las dos épocas. Y no solo entre ellas dos, si no también con el resto de personajes. El final me ha gustado muchísimo. Ha sido totalmente cerrado, además de llevarme una enorme sorpresa con todo, no me esperaba para nada toda esa trama. Admitiré que la novela no es lo que me imaginaba, pero no por ello es porque sea peor, simplemente, diferente a lo que esperaba, pero aún así he disfrutado mucho de su lectura y sin duda alguna ha sido totalmente buena. Resumiendo... La casa de Foster Hill es una lectura en la que no va faltar el suspense, misterio, sucesos extraños, secretos ocultos, del pasado y de la actualidad... Además de una casa que parece encantada. Enlace: http://entreunmontondelibros.. |
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