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Tras terminar de leer este libro no sé si decir que Danny, el protagonista, ha nacido con una estrella en la frente o una patada en el trasero ya que persigue la felicidad y la tranquilidad pero siempre le dan de lado. El libro comienza poco después del final de la primera parte y, si no te acuerdas muy bien de ella, durante los primeros capítulos el escritor nos va haciendo un resumen de lo que fue de la vida de los protagonistas en el anterior libro. Danny cabreó a mucha gente de diferentes palos, es decir, tanto dentro como fuera de la ley y ahora mismo su cabeza tiene diversos precios: hay quien quiere verla separada de sus hombros y hay quien quiere que todavía permanezca pegada a ellos por lo que pueda contar. Eso hace necesario que su nueva vida sea lo más discreta posible. Trabajos de poca relevancia, perfil bajo, cortés y educado con los vecinos y compañeros de trabajo, pero ninguna de confianza ni nada que permita recordarlo una vez que se haya ido. Por desgracia, esto no es a algo a lo que estén acostumbrados los hombres de Danny; tras toda una vida viviendo como mafiosos, recibiendo dinero sin hacer nada que no sea amenazar, coaccionar, asesinar o torturar se les hace muy cuesta arriba pasar desapercibidos, tener un horario y recibir órdenes que hay que cumplir. Así que es una especie de tragedia anunciada el hecho de que, antes o después, van a meter la pata y se van a delatar. Por si eso no fuera suficiente, alguien en Hollywood tiene la brillante idea de hacer una película sobre lo que ocurrió en el primer libro y el lío está servido. Con esta historia el escritor nos mantiene en un sin vivir constante sin saber cómo van a terminar los diferentes protagonistas. Se narra desde varios puntos de vista, así que sabemos lo que están haciendo tanto Danny como sus hombres y lo que hacen todos los que los van buscando: los pasos que dan en la dirección correcta o como se pierden de manera desafortunada. No es un libro amable con nadie, ya que la antigua vida de mafioso y el coste de la huida los persiguen con todo lo que eso conlleva de traiciones, engaños y asesinatos. Hay quien quiere redimirse, hay quien busca venganza a costa de lo que sea y hará lo imposible pasando por encima de cualquiera que se ponga en su camino con tal de dar con Danny y los suyos. Winslow, fiel a su estilo, no nos dejará descansar en ningún momento, incluso cuando se trata de pasajes un poco más tranquilos como los son aquellos en los que se nos narra como es la vida de los actores y actrices en Hollywood y la "desesperación" de algunas madres por meter a sus hijas en un espectáculo a costa de lo que sea. También deja bastante claro que todo el mundo, para bien o para mal, tiene un pasado y este pasado antes o después los va a alcanzar con consecuencias en el presente. En resumen: personajes complejos y bien perfilados, cada uno con una historia que amenaza con destrozar su presente y una trama que se complica y arrastra consecuencias del libro anterior. Para no perdérselo. |
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