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En esta novela se cuentan varias historias románticas muy bonitas, pero reconozco que me ha recordado a las típicas películas de sobremesa de los fines de semana. Los personajes están muy bien construidos y he logrado empatizar con la protagonista Annie Rush. En la novela encontramos desde la típica abuela adorable pasando por el chico bueno y el malo. En cuanto a la temática, entre otros, destacan el amor de pareja y hacia la familia, la fidelidad, los sueños y el valor para perseguirlos y la resiliencia. La novela se articula en veintisiete capítulos y un epílogo. Es importante tener en cuenta que los capítulos están narrados en el pasado (titulados entonces) y en el presente (titulados ahora). Estos tiempos se suelen ir alternando, aunque no en todos los casos. Estos saltos en el tiempo permiten entender mucho mejor el ahora, por lo que resultan imprescindibles para disfrutar la lectura al máximo. En lo relativo a la forma de escribir de la autora, es sencilla y ágil, lo que hace que se lea sin ninguna dificultad. No obstante, hay informaciones de las que creo que se podía haber prescindido. En definitiva, es una novela ligera de esas que nos permiten evadirnos de la realidad y que no nos obligan a pensar ni a crear conjeturas. Por ello, creo que es muy recomendable para ser leída en los días de verano. |
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