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No todo está olvidado se presenta como un thriller psicológico pero es mucho más que eso sin lugar a dudas. La forma en la que está narrada la historia me ha parecido bastante original pues es en primera persona y se nos explica que fue pasando a través de, digamos, recuerdos, de cosas que ya han ocurrido. Por otro lado hay una total falta de diálogos propiamente dichos y, aunque te acabas acostumbrando, se nota que no hay y se les echa en falta pues a veces la trama es un poco pesada y lenta al estar todo escrito en párrafos. Me ha parecido la mar de interesante que se nos hable de como funciona el cerebro en cuanto a la memoria y a almacenar recuerdos y que se nos den explicaciones bastante médicas pero debo reconocer que dichas explicaciones en ocasiones llegan a cansar y a saturar pues a veces están demasiado presentes y, también, algunas son un poco difíciles de seguir. Eso si, en ningún momento sobran pues es algo que indudablemente enriquece a la trama y a mi me gusta mucho que estén pues así aprendo cosas nuevas sobre el cerebro, sobre tratamientos y sobre como trabajan los psiquiatras y como plantean sus terapias. Hay otras historias bastante secundarias que tienen como protagonistas a personajes que, están unidos de una forma u otra a la protagonista, Jenny, pero que realmente no tienen casi nada que ver con el hilo principal de la trama por lo que, aunque es cierto que aportan dinamismo y suponen un respiro de la historia principal, acaban por confundir un poco al lector y por ser más bien relleno pues, salvo un par que complementan bien a la historia y la refuerzan, las demás no aportan nada realmente importante. Es muy reflexivo e invita al lector a replantearse muchas cosas. Por un lado, el tema del medicamento es algo muy controvertido y hace que uno piense si realmente es bueno dárselo a alguien pues, aunque permite que olvide las cosas que pasaron y, por lo tanto, no le quede trauma, los sentimientos están aún ahí y al no saber identificar que son ni que los provoca, destrozan a las personas por dentro, las rompen y vacían. También nos hace ver como afectan las cosas a las personas, como alguien puede tener un trauma o algo le ha podido dejar muy herido interiormente y no ser consciente de ello. También supone como un viaje a nuestro yo interior, un viaje hasta lo más profundo de nuestro ser pues nos hace ser más conscientes de como somos realmente y de lo que guardamos profundamente en nuestro interior. Por otro lado se nos habla también del arrepentimiento, de la culpa, de lo que somos capaces de hacer por sobrevivir y por proteger a alguien muy querido, de lo fácil que es manipular el cerebro humano, de como dejando una semillita o prendiendo una pequeña llama se pueden alterar recuerdos y se pueden crear algunos falsos que se aceptan perfectamente como reales. La autora expone muy bien como cada personaje lleva las cosas, como las vive, como las interioriza, como las expresa, como las siente, como le afectan, como está y es por dentro y como se muestra ante la gente...Lo hace todo muy real y cercano y supone un gran contraste pues vemos que hay grandes diferencias entre cada uno. El misterio en si, es una de las cosas que más me han flojeado. Es muy light y acaba siendo demasiado secundario. Es cierto que siempre está ahí y que siempre se va avanzando en el, en pos de saber quien es el culpable y descubrir que pasó, pero está muy dosificado y tiene menos importancia de la que me habría gustado. Por otro lado, la autora lo mantiene muy bien y va dejando constantemente pequeñas píldoras que incentivan la curiosidad del lector y le hace querer saber más y más. No hay amor propiamente dicho pero se nos habla de el, eso si de una forma poco convencional pues es una visión algo más científica la que tenemos de el en el libro. Se nos muestra que lo que muchas veces parece amor no lo es y que esconde otras cosas, otras necesidades y que, el amor más real conlleva muchas más cosas que el simple hecho de querer a alguien. El final nos enseña que, después de todo, saber quien agredió a Jenny es lo de menos. Evidentemente, se descubre quien lo hace y es importante, pero el lector acaba con la sensación de que el libro ha sido mucho más que el simple hecho de descubrir que pasó, porque, como y quien lo hizo y que ha acabado por ser un viaje profundo, duro y a veces muy doloroso pero que, sin dudas, ha valido la pena recorrer. Saber quien lo hizo deja al lector un poco igual y por ese lado me hubiese gustado que fuese más impactante pues aunque sorprende, te deja indiferente y lo que acaba por sorprender más es saber algo qué ocurrió en el pasado y que el lector no se espera para nada. Los personajes no están mal construidos pero siento que no he conocido a ninguno realmente bien pues es como si todos hubiesen pasado por un filtro y estuviesen incompletos, como si solo se supieran unas pocas cosas de ellos y solo se vea una parte de su personalidad y su forma de ser y no un todo más completo. |
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