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Cada estrella de mi cielo cuenta la historia de Madison, una chica de diecisiete años que sufre, desde hace un año y poco, ataques de pánico y ansiedad, tras un suceso traumático. Desde pequeña, su mejor amigo había sido Aiden, su vecino, pero un día le mandaron a un correccional y no volvió a saber más de él. Dos años después, Aiden vuelve y, con él, todos los recuerdos que tenían ambos, como si alguna vez hubiesen dejado de pensar en el otro. Pero en esos años, han pasado muchas cosas y ya no son quiénes eran. Lo que más me ha gustado ha sido Madison y toda su historia. Ya no solo cómo afronta, gracias a su terapeuta, los ataques de ansiedad y pánico, sino cómo va intentando ponerse a prueba para superarlo. Además, Aiden me parece el típico chico del que te enamorarías en la vida real porque ¡Es tan bueno! Los capítulos son súper ágiles y adictivos. Están narrados por Madison, Aiden y por la mejor amiga de Madi, Zyra. de esta manera, escuchamos sus pensamientos ante todas las situaciones. Y, por esto mismo, Aiden no se hace un personaje irreal, porque también conocemos sus miedos. El final me ha gustado mucho y me encantaría leer cómo van los personajes un tiempo después. Es un final perfecto para esta historia. En resumen, Cada estrella de mi cielo es una historia de amor, propio y hacia los demás. Con temas duros y, por desgracia, actuales. Con capítulos muy adictivos. Con un final que, después de todo, te dejará una sonrisa en la boca. |
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