En el Gun Club de Baltimore, tres científicos aficionados preparan el mayor salto intentado nunca por los hombres, sirviéndose de un proyectil, que contiene una cabina para los decimonónicos astronautas, y un gigantesco cañón para dispararlo más allá de la atmósfera. De la tierra a la luna se publicó originalmente por entregas en el periódico francés Journal des Débats. Julio se ganó al público desde el primer capítulo (igual que me pasó a mi), está dividida en dos partes, la primera que narra los preparativos del viaje y la segunda nos cuenta el viaje en sí. Escrita durante la época optimista del autor es una novela llena de sátira, buen humor y en la cara un pastelazo con divulgación científica que te engancha y no te suelta en ningún momento. |