Son tres relatos en los que Truman hace un retrato de su infancia y para ello elige momentos muy importantes en la vida de muchos niños norteamericanos: Acción de gracias y Navidad. Estos cuentos abordan cuestiones que podrían haber resultado trágicas, como la ausencia de padres o la falta de cariño, pero que sin embargo, Capote nos las narra de manera que parezcan la única realidad posible.Tiene por amiga a una prima anciana, inocente como una niña, que es la bondad en estado puro, y su única compañía, junto a Queenie, una perrita ratonera. . Me ha gustado mucho su estilo cercano y coloquial, que hace que nos despierte empatía y cariño por estos singulares personajes. Y me han parecido unos cuentos muy emotivos que me han dejado con ganas de leer más de Truman Capote. |