La desconocida

La desconocida no es una novela al uso. Yo la veo como un ejercicio de escritura creativa desarrollado por dos grandes: Rosa Montero y Olivier Truc.

Esta historia está escrita a cuatro manos y con unas reglas que hacen que tenga que valorarla desde una perspectiva nueva. Ocho capítulos escritos de manera alterna por los dos autores. Una novela negra corta en la que había que condensar la acción y en la que cada uno debía continuar desde el punto en el que el otro lo había dejado. Los personajes estaban más vivos que nunca puesto que ni Olivier ni Rosa sabían qué les ocurriría cuando estuvieran en manos del otro.

El resultado es una historia que se lee de una sentada a la que su corta extensión y las condiciones en las que está escrita no permite una gran profundidad y desarrollo, pero que entretiene y sabe cerrar la trama.

No leas La desconocida si quieres volver a Rosa buscando lo que te ofreció en anteriores publicaciones. Tampoco si esperas un trasfondo novedoso. Pero anímate si sientes curiosidad por el resultado de este ejercicio de creatividad porque, sinceramente, desde ese punto de vista te sorprenderá. Y es que, no podemos juzgar La desconocida del mismo modo que lo hacemos con una novela planificada y sujeta a una escaleta, y es desde la silla de la improvisación y el ingenio que, para mí, esta publicación se vuelve más valiosa.