Una cabeza llena de fantasmas

Que me gusta a mí un buen libro de terror, y más aún si puedo leerlo junto a mi amiga y compañera de lecturas Nat. Entre las dos vamos diseccionando lo que vamos leyendo, con el hype a tope y, a este paso, voy a tener que cederle un espacio en este blog para que deje constancia de sus opiniones.

En esta ocasión, ambas estamos de acuerdo en que el autor logra transmitir la angustia y el terror al lector, con algunas escenas que recuerdan a los clásicos del terror y unas descripciones que ayudan a visualizar lo que está sucediendo en la historia.


¿Qué vamos a encontrar en esta novela? Una historia de terror narrada en primera persona por Meredith, Merry, Barrett, una joven de veintitrés años que rememora, quince años después, los sucesos acaecidos en su casa de la infancia.
A su vez, Karen Brisette, analiza meticulosamente en su blog el programa que se basa en el exorcismo realizado en la casa de los Barrett a la mayor de sus hijas: Marjorie.

En esta novela, los diferentes puntos de vista, la ciencia, la religión y la magia de la televisión, van a ir tergiversando la historia hasta que podamos ir descubriendo poco a poco lo que le sucedió a Marjorie y cómo lo vivió Merry, con la inocencia de una niña de ocho años que no termina de comprender el mundo y su complejo funcionamiento.

La culpabilidad de Merry, la forma en que trata de afrontar una y otra vez lo que sucedió, contándole a Rachel, una escritora que quiere contar al mundo su versión de los hechos, nos llevan a pensar que no todo es lo que parece.

Misterio, terror, fanatismo y mentiras se van entremezclando en esta novela que no deja indiferente al lector, con unos personajes complejos y una crítica a la sociedad que prefiere juzgar antes de comprobar la veracidad de los hechos.


Mensaje de la novela: Si hay algo que busca transmitir el autor, es una crítica social a cómo juegan los medios de comunicación con el fanatismo y las historias que venden.

Incluso un reality show cuenta con cortes y juega con la realidad para provocar al espectador y llevarle por donde quiere.


Personajes: Paul Tremblay ha logrado crear unos personajes complejos a los que no llegamos a conocer del todo.

La magia de estos reside en esa evolución que van teniendo y en cómo se van desmoronando a medida que la presión social y la enfermedad de Marjorie les sobrepasa.

Tal y como ocurre en el mundo real, cada uno de los miembros de la familia Barrett va a afrontar la situación de un modo diferente, con las herramientas de las que disponen, así como su madurez o inmadurez (recordemos que Merry tiene solo ocho años en el momento de los hechos y Marjorie tenía catorce).

Quiero destacar la forma en la que el autor hace que Merry vaya cambiando de punto de vista, haciendo diferencias entre lo que pensaba a los ocho años y lo que comprende a los veintitrés, ya con la perspectiva de los años y la madurez adquirida.

Me gusta también que la propia Meredith reconozca el hecho de que el tiempo y las versiones de otras personas, le hagan dudar acerca de la verdadera cronología, pues sus recuerdos han podido ser contaminados.

En definitiva, tenemos unos personajes muy bien desarrollados y en constante evolución, imprescindibles para el desarrollo de la trama y su misterio.


Lo que más me ha gustado: Cómo el autor narra las escenas de terror, permitiendo al lector vivirlas como si estuviera junto a los personajes.

La construcción de los personajes y su desarrollo dentro de la historia.

Los giros en la trama y las sorpresas que se lleva el lector conforme la verdad va saliendo a la luz.

Cómo se mantiene el interés en la historia, con escenas vertiginosas y llenas de acción, entremezcladas con momentos de calma que preceden a la tempestad.

La pluma del autor, cuyas descripciones no resultan pesadas, sino necesarias y muy bien llevadas a cabo.


Lo que menos me ha gustado: Lo liosos que pueden resultar algunos puntos de la trama hasta que coges el hilo (tranquilos, se tarda muy poco).

Lo enrevesado del final, que no termina de convencerme.

La cantidad de erratas que hay en la novela.


Conclusión: Esta vez, no tengo dudas de que he acertado con una lectura de terror.

Aunque no me ha parecido una novela redonda (5/5), sí que ha sido una lectura que he disfrutado de principio a fin y que no puedo evitar recomendar a los amantes del género.

Una historia que atrapa y mantiene el ritmo, ideal para cualquier momento. Eso sí, si os animáis a leerla en Halloween, no hay momento mejor.