InicioMis librosAñadir libros
Descubrir
LibrosAutoresLectoresCríticasCitasListasTest
>

Crítica de Inquilinas_Netherfield


Inquilinas_Netherfield
14 May 2019
Yo y mis queridos rusos... Hacía tiempo que no os traía ningún ruso por estos lares, así que ya tocaba. Aun así, la reseña de hoy va a ser muy cortita porque muy cortito es también este relato que la editorial Nórdica publicó allá por 2011 en su primera edición, y que fue ilustrado por Elena Odriozola. Bonito el continente, fantástico el contenido, y además es de Tolstói. Doy palmas con las orejas xD.

La historia comienza cuando dos hermanas (la mayor, que vive en la gran ciudad, y la menor, que vive en una aldea en el campo) glorifican las virtudes de la vida que lleva cada una. La de la ciudad, casada con un comerciante, alaba sus buenas ropas, los teatros, la vida elegante y refinada...; la menor, casada con un campesino, afirma que la gente de campo no vive con miedo como los comerciantes, y que en la aldea tienen una existencia tranquila y segura y no tienen que preocuparse de perderlo todo en un abrir y cerrar de ojos. Pajom, el marido campesino de la menor, interviene en la conversación para decir que lo único que lamenta es tener pocas tierras, porque si tuviera muchas, no tendría miedo ni del Diablo... lo que no sabe Pajom es que el mismísimo Diablo en persona, agazapado tras la estufa, ha escuchado la conversación, y acepta la apuesta: decide darle muchas tierras a Pajom, y a ver qué pasa, aunque él está seguro de que Pajom caerá en sus garras y no se conformará con que su suerte mejore.

Poco a poco el Diablo irá sembrando el camino de Pajom de envidia ante la prosperidad de otros y oportunidades para que su patrimonio vaya creciendo, la extensión de sus tierras aumente, sus cosechas sean buenas... y Pajom, ante lo bien que le va todo, siempre querrá más, venderá, comprará, volverá a vender y volverá a comprar, emigrará de un lugar a otro en busca de nuevas tierras a buenos precios y mejores propiedades... cuanto más tiene, más quiere; cuanto mejor le va, más arriesga... hasta que se cruza en su camino la noticia de que los bashkirios, habitantes de una tierra lejana, le venderán por mil rublos toda la extensión de sus tierras que pueda recorrer en un día pero con una condición: tiene que estar de vuelta antes de que se ponga el sol.

Poco más os puedo contar sobre el relato porque decir que esta historia gira en torno a la ambición desmedida se deduce de la sinopsis y resulta evidente con lo que os cuento arriba. Y más allá de ahí no se puede contar nada porque es un relato que se lee en apenas quince o veinte minutos. Tolstói usa al Diablo como impulsor de esa ambición, pero durante toda la narración subyace lo que todos sabemos y que el autor, gran observador de la naturaleza intrínseca del ser humano, plasmó de manera magistral en toda su obra: que cada persona tiene sus debilidades de carácter, y que en ocasiones solo hace falta un empujón, por muy aleatorio que sea, para que esas debilidades florezcan y sean su perdición.

Es un relato breve pero escrito de manera soberbia, fluida y muy al estilo de la narración corta de Tolstói, con esa sencillez aparente que esconde una conexión vibrante con el lector escogiendo casi al milímetro cada palabra y reflexión que quiere transmitirle. A esto hay que añadir la universalidad del tema que trata, la ambición que lleva al ser humano a tomar decisiones que ni siquiera le hacen más feliz porque esa misma ambición jamás se ve satisfecha y siempre le pide y le exige más, y más, y más... Esta historia tiene más de 130 años y podría haber sido escrita ayer mismo aplicándola a mil noticias que vemos o escuchamos en las noticias todos los días.

El final es fantástico, y la última frase, la frase con la que Tolstói cierra la historia, es sencillamente magnífica: en apenas unas palabras da un palmotazo elegante en la mesa y resume a la perfección cuál es el fin último de todo lo que acumulamos en vida sin ninguna medida, en qué queda realmente toda esa ambición sin tabiques que la moderen. ¿Cuánta tierra necesita un hombre? merece mucho la pena, se lee en un ratito y transmite un mensaje que, a poco que se conozcan la filosofía y el pensamiento del autor, no extrañará a nadie. En sus propias palabras (que no del relato): La ambición no hermana bien con la bondad, sino con el orgullo, la astucia y la crueldad.
Enlace: https://inquilinasnetherfiel..
Comentar  Me gusta         11



Comprar este libro en papel, epub, pdf en

Amazon ESAgapeaCasa del libro
Apreciaron esta crítica ()(1)ver más