Ya desde el inicio de la lectura empiezas a dibujar una sonrisa. Una historia entretenida y amable que te va llevando sin sorpresas a un desenlace casi esperado. O no. Leyendo página a página te vas contagiando de un optimismo fácil. Llegas al final del libro con la impresión de haber acabado la tarea. Sin embargo, sobran las tres últimas palabras. Sólo las tres últimas palabras. |