Es el primer libro que leo de Dona Ter y no creo que sea el último, me gusta. Te engancha desde el inicio. Candy se ve obligada por su jefe a convencer a Lionheart para que escriba un villancico y sólo dispone de quince días para conseguirlo. Si tan sólo fuera esto sería sencillo, pero hay varios detalles que se van descubriendo a medida que avanza la historia y que convierten lo que parecía una trama sencilla, en algo profundo y mucho más interesante. Los capítulos, no todos, se suceden en dos años distintos pero que no despistan para nada. Están intercalados de forma que vamos viendo las consecuencias de lo que sucedió un año antes. Merece la pena leerlo. |