Paradero desconocido

“… Siempre te he considerado un amigo querido y respetado pero, comprenderás que hablo con absoluta sinceridad, si digo que te he querido no por tu raza sino a pesar de ella.”

Como siempre libro corto en extensión pero que ha dado para un amplio debate con mis compañeras. de género epistolar vemos cómo la ambición, el brillo del status social y el dinero corrompe una larga y sincera amistad entre Martin y Max, que no era sólo comercial.
Martin vuelve a una Alemania empobrecida, dejando en manos de Max en EEUU su negocio de arte. El dinero ganado más el que le reporta mensualmente Max mediante cheque le permite vivir igual que la clase alta Alemana. Eso le deslumbra y cuando surge el movimiento social comunista es incapaz de renunciar a esa forma de vida. Surge en él esa hipocresía que le hace rechazar al judío pero no al dinero que estos le proporcionan, (ya que sus clientes en américa lo son). En ningún caso he justificado su comportamiento por miedo o por protección a su familia. Él realmente creía en el movimiento Hitleriano por lo que no duda en traicionar y vender a la hermana de Max.
El final me ha encantado porque soy de las que piensan que la mejor venganza es la que se sirve fría … y fría y muy contundente son las acciones de Max. Ojo por ojo (y aunque nos quedemos ciegos es a veces la única justicia que nos puede proporcionar paz interior).