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Soy muy fan de la casa de papel y este libro tenía que estar en mi estantería. Es un libro muy curioso y con una edición muy cuidada. La trama se nos presenta de tal forma que el profesor, le envía cartas a un amigo suyo de la infancia y este amigo que se llama Jero, tiene que ir descubriendo las pistas que le va dejando junto con esas cartas. Para abrir las cajas donde están las pistas entramos nosotrxs como lectorxs ya que a través de las pajaritas tendremos que ir resolviendo lo que se nos plantea. He disfrutado muchísimo resolviendo los enigmas y rompiéndole la cabeza para no mirar ni las pistas, ni la soluciones pero ha habido algún momento en el que he tenido que hacer trampillas inevitablemente para poder avanzar. Recomiendo este libro a cualquier fan de la casa de papel ya que vas reviviendo momentos y refrescando la memoria. El profesor le habla a Jero en sus cartas de los pasos que siguió, como se sintió en cada momento, sus planes, lo que salió bien y lo que salió mal. Te cuentan la serie de una manera diferente pero sin perder la esencia. No puedo más que recomendarlo. |
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