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Reseña en IG @angela.lectoravoraz 4,25 Una niña es arrancada de su padre en plena Segunda Guerra Mundial. Se halla el cadáver de un hombre que parece estar relacionado con la desaparición de un niño. Los guardias civiles Cristina Albino y Anselmo Picarzo son los encargados de la investigación. Pero ¿qué tendrán que ver ambos hechos? La paz en Aldeanegra está a punto de desaparecer para ser testigo del dolor de una madre y de cómo el pasado deja huella. Menuda mezcla la de este libro, thriller con histórica. Además, con diferentes líneas temporales y narrado por varios personajes. Desde la primera página lo que logró cautivarme fue la pluma de la autora, que me encantó. También hace un gran trabajo a la hora de crear a sus personajes. Empatizas con ellos desde el principio; a otros solo podrás odiarlos. Porque, sí, en este libro vas a odiar y mucho. Me ha encantado esa mezcla de thriller con histórica. Esta última parte se desarrolla en la Segunda Guerra Mundial, con una niña judía como protagonista. Ya os podéis hacer una idea de la dureza de este libro. Es desgarrador ver por lo que pasa, aunque también es inspirador ver el coraje y la valentía que residen en su interior. En cuanto a la parte de thriller, sufrí mucho según iba llegando al final, puesto que la autora se esmera tanto en presentarte a los personajes, que, cuando todo se tuerce, sufres por ellos. Me tuvo muy en tensión. Además lo paso muy mal siempre que hay niños de por medio. Es cierto que no todas las narraciones me interesaron por igual, y eso en algún momento contribuyó a que se realentizara la lectura. Pero fue durante poco tiempo. Es increíble cómo todo va cobrando sentido y cómo cada línea temporal está conectada entre sí. He disfrutado mucho de esos saltos temporales. Lo recomiendo si te gustan los thrillers mezclados con histórica, con diferentes líneas temporales y narradores, que estén muy bien escritos y con unos personajes que te ganarán el corazón. También si quieres una lectura ágil y adictiva, esta es una buena opción. |
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