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La comadrona de Berlín es la segunda parte de una serie de libros, se puede leer de manera independiente como ha sido mi caso sin ningún problema. Hulda se dedica a traer niños al mundo en una época complicada. En 1923 tiene un parto diferente, su paciente no tiene buena relación con la familia del padre del niño, no aceptan que su nuera no sea judía. Unos días después el niño desaparece y Hulda no puede quedarse de brazos cruzados, decide investigar que ha pasado y esto hace que ella misma se ponga en peligro. · Lo primero que destacaría es la época en la que está ambientada ya que no he leído mucho sobre estos años. Me llama la atención el odio que ya había hacia la comunidad judía y todo lo que nos cuentan sobre la inflación y la crisis social de aquella época. Destacaría la ambientación, pero principalmente el personaje de Hulda ha sido lo que más me ha atrapado de esta historia. Un personaje fuerte, con carácter y adelantada a los tiempos que corrían. El libro está contado por varias voces y en él encontraremos desde misterio, investigación, contexto histórico hasta amor. Muy recomendable para los amantes de la histórica con un toque diferente. |
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