Feliz año nuevo

Un thriller que se lee en un suspiro por su estructura: capítulos cortos, narrado en primera persona por tres narradores, sabe mantener la tensión y la sorpresa hasta el final.

Nina y Fredrik son un matrimonio que tienen tres hijos. Ambos deciden acudir a la fiesta de Nochevieja de un matrimonio amigo, Lollo y Max, mientras su hija adolescente Smilla y la hija de sus amigos, Jennifer, celebran la fiesta de fin de año en su casa. Nina no está muy convencida de dejarles la casa para la fiesta, pero Fredrik logró convencerla diciéndole que ya eran lo suficientemente responsables para ello.

al día siguiente, la voz de alarma se da cuando Jennifer no aparece y nadie sabe qué ha sido de ella desde que decidió marcharse de la fiesta demasiado pronto. ¿Qué le ha pasado a Jennifer? ¿Alguien la retiene y por qué? ¿Quién conoce realmente a la adolescente?

La lectura es muy adictiva y rápida, terminas cada capítulo con ganas de continuar leyendo; sí es cierto, que en un momento dado parece desinflarse la trama porque crees que ya sabes todo lo que sucedió, parecía demasiado evidente y muy trillado, pero nada más lejos de la realidad... los giros argumentales empiezan a desmantelar cualquier cábala que hayas hecho. Hasta la última línea de la novela esconde sorpresita.

También me ha gustado conocer la historia desde tres puntos de vista diferentes. Por un lado, Lollo, madre de Jennifer, nos irá contando cómo se enfrenta a la situación y todas las dudas que la persiguen; los otros narradores serán Fredrik y Nina, ya que la última vez que se vio a Jennifer con vida fue en la fiesta que se estaba celebrando en casa de estos mientras ellos no estaban.

Lectura aconsejable para desconectar y pasar un buen rato, aunque no nos hace escapar de ciertas reflexiones que nos deja por el camino como pueden ser las relaciones entre padres e hijos, el uso de las RRSS, la amistad, etc.