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Si hay un autor que disfruto mucho leer en esta época del año es a Nicholas Sparks. En esta ocasión elegí un libro del cual hace mucho tiempo atrás vi su adaptación cinematográfica. La historia nos presenta a Logan Thibault. Él es un ex marine quien durante una de su misiones en Irak encuentra la foto de una joven desconocida. Nadie reclama el retrato y desde el momento en que decide quedárselo la suerte parece estar de su lado. Una vez de regreso en Estados Unidos, Logan va en búsqueda de esa misteriosa joven junto con su perro Zeus y termina encontrándola en un pueblo de Carolina del Norte. Beth vive con su pequeño hijo Ben y su abuela en Hampton, Carolina del Norte. Desde que su abuela sufrió una embolia, Beth la ayuda en su residencia canina pero la verdad es que sabe que con su trabajo de maestra se le dificultará seguir haciéndolo por lo que decide contratar un ayudante. Su sorpresa es grande cuando Logan aparece junto con su perro Zeus solicitando el puesto. Logan y Zeus irrumpirán en la vida de Beth y Ben cambiándola por completo. Como dije antes ya había visto la película basada en este libro así que ya sabía con lo que me iba a encontrar. La historia está narrada desde el punto de vista de Logan, Beth y Keith, el ex marido de Beth y padre de Ben. Logan es un personaje solitario y callado que tuvo que presenciar un sin fin de horrores durante la guerra y que por una conversación con su mejor amigo Víctor se embarca en la búsqueda de la joven de la foto. Beth es una maestra de escuela y madre soltera que no ha tenido mucha suerte en el amor pero que está dedicada a su pequeño hijo. Logan entrara en sus vidas trayendo un aire diferente que es lo que más necesitan tanto ella como Ben. Sobretodo el niño que no ha tenido una muy buena figura paterna. Keith es bastante inmaduro, no sabe apreciar a Ben y varias de sus actitudes me sacaron de quicio. La historia se lee rápido y me gusto ver como se iba desarrollando la relación entre Beth y Logan. El es diferente a los pocos hombres con los que ha salido Beth y aunque tenga el presentimiento que le oculta algo, no puede negar su amabilidad y dulzura. Además que también me encanto como Ben se abría poco a poco con Logan y como disfrutaba jugar con Zeus. Creo que esta es una buena lectura para pasar el rato y aunque como toda historia de Sparks no puede faltar un poco de drama, no es tanto como uno esperaría. |
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