Bajo el fuego y la sal

Antes de comentar mi opinión quiero agradecer a Edhasa editorial y a Babelio el envío de este ejemplar a través del programa Masa critica.

Bajo el fuego y la sal es una novela histórica, sí, pero de aventuras y batallas sin fin, muchas navales, donde hay momentos que tienes que restregarte los ojos porque sientes que te ha salpicado el agua del mar en los ojos y te pican.

He de decir que los primeros capítulos tuve que releerlos para centrarme bien en el libro. Y es que sucede todo con rapidez, porque la novela no deja de ser una cuenta atrás por conseguir unos objetivos, y cada personaje va a por su propio beneficio. Nada nuevo en esta vida en la que el altruismo brilla por su ausencia.

Estamos ante una novela de capítulos cortos donde, cada uno de ellos nos presenta un momento en la historia del personaje, yendo hacia adelante o atrás, según quiere mostrarnos el autor relaciones o situaciones de los personajes.

Y hablando de personajes ¡he disfrutado con ellos! Pendencieros, crápulas, traidores, vengativos, asesinos… pero con honor.

Porque si hay que morir no cabe el deshonor.

Me ha llamado la atención cómo cierra el libro el autor con cinco epílogos, uno por personaje dándoles su final en la historia. Esto, como ya he dicho al principio, me ha parecido más propio de novela de aventuras. No me ha disgustado más bien me resulta
curioso.

En definitiva un libro que más adelante releeré para disfrutarlo con más calma ya que lo he leído con las velas del dromo desplegadas y el viento a favor.

Es lo primero que leo de este autor y me ha gustado.